El storytelling es algo muy útil para cualquier marca que quiere conectar con su audiencia a través de una historia (o varias).
Algo que puedes usar en tu estrategia de marketing digital en varios canales, como en tus redes sociales, en tus emails, en tus campañas publicitarias o en tu página web.
Pero cuidado porque si no se hace correctamente podrías emitir un mensaje muy diferente al que te gustaría.
Te cuento todo lo que debes saber para poder hacer un buen storytelling para tu marca o empresa Share on XAsí que, vamos a ver todo lo que debes conocer y tener en cuenta a la hora de crear un storytelling para tu marca o empresa.
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¿Qué es el storytelling?
El storytelling se suele definir como el arte de contar historias.
Pero si con esto no te queda del todo claro, te digo que el storytelling es una forma de narración estructurada que se utiliza para comunicar un mensaje a través de una historia real o ficticia.
Este tipo de narrativa está muy relacionada con el uso de valores y emociones para recalcar ese mensaje y conectar con las personas que lo escuchen.
Es algo que lleva con nosotros desde los tiempos de los juglares y trovadores y que se usa mucho en anuncios o contenidos de redes sociales, en el ámbito del marketing.
¿Por qué es importante utilizar el storytelling?
Las buenas historias bien contadas, enganchan.
No puedes negar que cuando has escuchado una buena historia, le has prestado atención, te has interesado e incluso te has metido en la historia o la has recordado en otras situaciones.
Ese es el poder del storytelling, el que en un momento en el que vamos consumiendo contenidos a la velocidad de la luz te pares, te quedes escuchando o leyendo, te genere una emoción y recuerdes esa marca y esa historia en el tiempo.
Tipos de storytelling
La narración de historias puede darse en diferentes formatos y géneros.
Si nos centramos en su formato, podemos clasificarla en:
- Narración escrita, utilizando el texto. Por ejemplo, un libro.
- Narración oral, utilizando la voz. Por ejemplo, un podcast.
- Narración visual, utilizando elementos gráficos. Por ejemplo, una pintura.
- Narración mixta, que combina las anteriores narraciones según necesite la historia para tener más sentido.
Según el canal que uses te será más interesante una u otra narrativa, o la combinación de dos o tres narrativas.
Elementos del storytelling
Ahora que tenemos claro qué es el storytelling y por qué es importante, vamos a ver cuáles son los elementos clave que necesita tu historia.
Personaje
Esa historia debe tener un personaje principal al que le pasen las cosas e incluso también puede tener personajes secundarios que participen en la historia, aunque no se cuente desde su perspectiva.
Ambiente
La historia necesita suceder en un lugar concreto y para que la persona que la escuche, la lea o la vea pueda conectar con ella, necesitas describirlo al detalle.
Conflicto
Para que esa historia enganche, necesita ocurrir algo en concreto, un desafío que tenga que afrontar el personaje principal de la historia y que no sea algo muy fácil de conseguir para que valoren el conflicto.
En este punto debes prestarle la atención qué contar para que ese conflicto conecte y la historia tenga sentido. Analiza desde qué momento debes empezar a contar la historia.
Las personas necesitan contexto para poder valorar adecuadamente una historia.
Resolución
Por último, ese conflicto debe resolverse por dos motivos de gran peso:
- Necesitamos que la historia tenga un final para darla por concluida.
- Necesitamos trasladar un mensaje para que la historia quede en la memoria.
Por lo tanto, hay que llevar esa historia desde el inicio del conflicto hasta el punto de inflexión y, finalmente, hasta la resolución.
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¿Cuál es la estructura de un buen storytelling?
Hay diferentes estructuras que puedes seguir a la hora de escribir tu storytelling, pero vamos a la parte común a ellas y más simple para que puedas iniciarte en esta narrativa.
Inicio
Empieza desde el principio presentando a los personajes, el escenario en el que sucede todo y la situación que va a desarrollarse.
Aquí debes pensar cuánto tiempo tiene sentido retroceder con respecto a la actualidad para contar esa historia, ya que puede haber momentos que sean poco interesantes o nada relevantes para la historia.
Contexto
Es la parte que une el inicio con el punto de inflexión.
Aquí debes centrarte en hablar de esa parte de la historia en la que van pasando cosas que son relevantes para llegar al punto de inflexión y que son necesarias para entender el porqué de la historia.
Punto de inflexión
Es el momento clave de la historia, ese en el que el protagonista toma la decisión de hacer algo que cambie su situación y que va a hacer que se precipite hasta el final de ésta.
Final
Es la parte que une el punto de inflexión con la conclusión o moraleja de tu storytelling.
Debes centrarte en compartir lo que ocurre desde ese punto de inflexión hasta la moraleja o mensaje que quieras transmitir con tu historia.
Moraleja
Después de ese final o desenlace, toca transmitir tu moraleja o mensaje, eso que se va a llevar la persona a la que ha llegado tu storytelling.
Es importante centrase muy bien en ese mensaje para que cale en las personas y conecte con ellas, reforzando el valor de éste.
¿Cómo hacer storytelling con tus contenidos?
Ahora que ya tenemos toda la información sobre el storytelling, toca ponerse a crear el tuyo. Vamos paso a paso.
Conoce a tu audiencia
Si tienes un negocio, deberías de saber bien ya quién es tu cliente ideal o buyer persona, esa persona a la que quieres llegar con tu marca y con tu storytelling.
Si no es así, antes de ponerte a escribir analízalo, porque esto no va de escribir cualquier historia para todos, sino de centrarte en conectar con las personas adecuadas.
Decide el objetivo de tu storytelling
Piensa en tu objetivo, por qué quieres hacer un storytelling.
Puedes hacerlo para dar a conocer la historia de tu marca personal o tu marca empresarial, para educar a tu audiencia sobre algo concreto o como parte de una de tus campañas publicitarias.
Pero siempre debes tenerlo muy claro antes de ponerte a desarrollar nada más.
Define el mensaje que vas a emitir
Otra cosa muy importante que definir es el mensaje que quieres emitir con tu storytelling, que dependerá del objetivo y de tu audiencia.
Ese mensaje es lo que quedará en la mente de tu audiencia, si haces un buen storytelling, así que no puedes dejarlo al azar.
Tiene que estar muy bien definido porque va a marcar la historia que vas a contar.
Escoge el tipo de historia que vas a contar
Ahora sí, ya tienes toda la información para avanzar y escoger el tipo de historia que vas a contar.
Incluso los canales que vas a usar para contarla (que hemos visto más arriba).
Ponte a redactar
Solo después de todos los pasos anteriores, toca ponerse a escribir.
Hay diferentes formas de hacerlo, pero muchas veces la más sencilla es redactar absolutamente toda la historia para luego revisarla, eliminar lo que no aporte y desarrollar más lo que veas que se queda “cojo”.
Comparte tu storytelling
Una vez ya tienes redactado y revisado tu storytelling, toca compartirlo a tu audiencia.
Puede que no salga perfecto a la primera, sobre todo si es el primer storytelling que haces, pero no pasa nada.
Recoge el feedback, analiza si has conseguido el objetivo o no y rectifica lo que necesites hasta llegar a esa historia que realmente conecte y funcione.
Consejos para hacer un buen storytelling
Para finalizar este post quiero compartirte algunos consejos que me parecen importantes y que a veces, se olvidan o se dejan de lado.
Ten claro tu mensaje
El storytelling se usa para contar una historia que deje claro un mensaje concreto.
Si tú no lo tienes claro, no podrás transmitirlo bien a esas personas a las que se lo emitas.
Ten claro tu receptor
Piensa a qué personas estás dirigiendo tu historia antes de ponerte a elaborarla para poder conectar con ellos y con el mensaje que les transmites.
Si escribes para todos, no conectarás con nadie en concreto.
Escribe y rectifica
Como ya te he comentado, a veces la forma más sencilla de hacer un storytelling es escribir toda la historia que quieres compartir completa y luego hacer una revisión para ver qué partes se pueden eliminar y qué partes se deberían desarrollar más para que tuvieran toda la información necesaria, sin paja.
Apela a las emociones
Un buen storytelling va a emitirte una emoción en concreto, si tu historia no lo consigue no es storytelling, es otra cosa.
Relaciona tus valores de marca
Si quieres no solo contar una historia, sino que esa refleje cómo es realmente tu marca y qué le importa, relaciona tu storytelling con los valores de tu marca.
Cuidado con omitir información
Para contar un buen storytelling, debes hacerlo sin censurar ninguna parte importante.
Si hay algo que no quieras contar que afecte directamente a esa historia, mejor no contarla porque puede emitir un mensaje contradictorio.
Conclusiones
Sé que son muchas cosas las que tener en cuenta para redactar un buen storytelling, pero te aseguro que es algo muy interesante para cualquier marca y que va a hacer que conecte tu audiencia mucho más.
Si quieres que te ayude con tu storytelling, escríbeme y hablamos.
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